Legado

Hay un tiempo para cada cosa,
y un momento para hacerlo bajo el cielo...
Hay un tiempo para nacer y otro para partir...
Un tiempo para sembrar y otro para cosechar...
Hoy es tiempo de dar...
Dar Gracias por esta nueva oportunidad que tenemos para dejar el verdadero Legado a la nueva humanidad...

La Casa de los abuelos, dí este nombre porque, cuando niño me encantaba visitar la casa de los abuelos, eso era como ir a un sitio mágico, lleno de gratas y dulces sorpresas.-
Hoy creo que sucede lo mismo con mis hij@s y también los nietos.
Bienvenidos a este humilde sitio, que es mi hogar...
Dedicad@ a tod@s l@s Abuel@s, Padres, Hijos y a especialmente a tod@ niñ@ del este nuestro planeta Luz Tierra.-
Amor, Luz y Paz a tod@s quienes comparten conmigo este Sitio.
William Agustín


domingo, 28 de noviembre de 2010

Carta Abierta a mis hijos y Nietos






   Ahora que termina este año quiero deciros a cada uno y a todos, lo mucho que os quiero y lo importante que sois para mi.
   En esta vida he aprendido dos cosas: que cada uno de nosotros es especial en el universo, y que el amor es el recurso más poderoso con que contamos. Nuestra contribución con el planeta ha de consistir en desplegar todas nuestras potencialidades personales, y conceder a los demás el mismo privilegio. Si actuamos así movidos por el amor y la dedicación, sin esgrimirnos en jueces, cuando nos vayamos, cosa que nos tocará a todos, habremos vivido a plenitud.
   Nuestra en la vida consistirá en ser felices y tan positivos como buenamente podamos.  Éste es nuestro derecho divino, y a menos que estemos realmente contentos con nosotros mismos y nos queramos como individuos únicos y especiales que somos, nunca podremos darnos totalmente a los demás  para hacer de este planeta el lugar maravilloso  y pacifico que a todos nos gustaría que fuese.
   Amor propio no significa egoísmo. Es la manera mas perfecta y positiva de agradecer tu vida a Dios.  Si te amas a ti mismo y sabes que eres perfecto a los ojos de Dios, serás capaz de irradiar este mensaje a los demás y fortalecer e ellos la idea de que también son perfectos. Esa es la única manera de que podemos alcanzar ese algo fugaz que llamamos felicidad.
   La felicidad en si no existe.  Es una ilusión.  Solo estando contento con uno mismo seremos capaces de hallarla.  Si la buscamos por todo el mundo hasta la muerte, nunca la encontraremos.  Tampoco  nos la proporcionarán las cosas materiales, la agitación  ni las otras personas, aun deseándola, comprándola o arbitrando cualquier otro medio.  Es algo totalmente personal que sale de dentro.
   Lo maravilloso es que esta allí para todos, y que con independencia de quien seas o cuales son tus circunstancias. Debes comprender que este es tu don. La mereces incondicionalmente.  Nunca debes depender de que la otra persona de "DÉ" la felicidad; eso significaría una pesada carga para los dos.  Si eres realmente feliz en tu interior y le otorgas a otra persona ese mismo derecho, automáticamente os brindaréis felicidad uno a otro sin intentarlo siquiera, y eso es una ventaja por que ni las esperas ni las  anticipas…;  simplemente es. 
   Nuestra responsabilidad para con nuestro planeta, para con nosotros y hacia los demás consiste en mostrarnos  tan positivos  como podamos. Esto no quiere decir ser irreales; solo significa que sin que importen las circunstancias ni cómo nos afecten, mantengamos nuestra calma interior, nuestra firme convicción  de que somos únicos y de que nada puede debilitar nuestra fe en nosotros mismos si no lo permitimos.
   En la vida debemos aceptar cada situación con dignidad y amor y darle a la otra persona el mismo derecho.
   La vida no es un juego donde deba haber un ganador y un perdedor. "Todos somos ganadores". Solamente cuando  nos sentimos o sentimos a los demás como  perdedores estamos poniendo un rótulo a algo que en realidad no existe.
   Permítete ser un ganador en la vida y deja que las demás personas también lo sean . Así, todos ganamos.
   La vida, es hermosa y maravillosa; Dios quiso que así fuera. Solo a través de nuestra  actitudes para con nosotras mismos  y los demás dejamos que pierda su perfección.
   Nuestro cuerpo esta hecho de miles de millones de células, y para que conservemos  una salud perfecta, cada una de esas células ha de tener un funcionamiento óptimo. Si algunas están  enfermas o débiles. Las sanas deberán trabajar mas para contra arrestar esa situación negativa, de manera a que todo el cuerpo  pueda estar sano.
   Nuestro planeta es como un cuerpo y cada uno de nosotros representa una célula. Nuestra responsabilidad para este cuerpo que llamamos nuestro planeta consiste en ser, cada uno, una célula sana y feliz que irradie nada más que bondad y actitudes positivas. Solo de esta manera lograremos  contrarrestar las células enfermas o débiles y hacer que nuestro mundo sea perfecto y maravilloso. En todos los sentidos.
   No hay cabida para los pensamiento negativos ni el egoísmo.
   Eso solo se puede lograr si nos esforzamos en ser mejores y dejamos que los demás gocen del mismo derecho.
   Debemos tratar de convertirnos en personas afectuosas y  cálidas sin prejuicios, y concederle a cada uno , sin que importen las diferencias de aspecto, comportamiento o creencias, el derecho a convertirse también en una persona así. Solo así sobrevivirá nuestro planeta.
   Espero vivir una vida larga y plena y seguir creciendo y aprendiendo, pero si mañana tuviera que irme, este es el mensaje que me gustaría dejaros a vosotros.
   Os amo a cada uno de vosotros y os acepto tal como sois. Lo único que deseo y espero  es que ejerciteis  vuestro derecho a ser fellices y plenos en tanto sois personas únicas. Yo, a cambio, trataré de ser la mejor persona que pueda, de manera  que nunca tengais que considerarme como una carga o sentir por mí ninguna responsabilidad que no sea la de compartir conmigo vuestro amor y vuestro ser como personas, si así lo decidís.
   Nunca haréis nada que me defraude ni que consiga que os ame menos. Contáis con mi Amor Incondicional y con la firme certeza  que eso no cambiara Nunca. Vamos cada uno por nuestro propio sendero, aunque nuestras vidas estén entrelazadas.
   Todo lo que deseo y espero de vosotros es que ejercitéis  vuestro derecho divino de ser felices y llegar a ser lo mejor que podáis, y que concedáis al mismo derecho  a los demás sin reservas ni condiciones.
   Au aloha oe nui loa (Os Amo mucho)
   Aloha (Amor)
   Makuabine a Totu Koloe (Mamá y Abuela Chloe).

Fuente: "La felicidad de nuestros Hijos". (Wayne Dyer).

Esta carta fue escrita por Chloe Robinson para sus hijos y nietos.
Refleja todo los sentimientos de Amor, sabiduría y libertad que hemos de transmitir a todos los niños, niñas, adolescentes y jóvenes de todas las edades, como legado. 

La lectura repetida, nos lleva a internacionalizar el mensaje, que hará de todos nosotros un mejor ser, amoroso, sabio y libre. Lo que deseamos a los demás, primero se cumple en nosotros...
Amor, Luz y Paz a sus Vidas.

No hay comentarios: